Anónimo
El fútbol, ese deporte de multitudes que genera tantas pasiones en todos los rincones del mundo, es el tema de hoy. Pienso que además de lo expresado, es una oportunidad para que los jóvenes que tienen talento para la práctica del balompié, se labren un mejor futuro económico. Ser practicante del fútbol merece que el deportista se mentalice, en el sentido de que a partir de que elige esta actividad debe consagrarse, su vida da un giro total. Por eso, si yo fuera futbolista esto haría: Reconocería que lo que hago es un privilegio que pocos se pueden dar: -Jugaría con amor, con pasión. -Dejaría hasta la última gota de sudor en el terreno. -Emplearía parte del dinero para crear empresas que generen empleo. -Sería muy disciplinado porque la vida de un futbolista es relativamente muy corta. -Me prepararía de forma excelente en lo físico, mental y psicológico. -espetaría a mis compañeros siendo solidario en la cancha, quiero que seamos un equipo. -Cantaría el himno de Colombia a todo pulmón en cualquier escenario. -o manejaría embriagado. -No me escaparía de las concentraciones por ningún motivo. -Trabajaría en equipo, todos ganamos o todos perdemos. -Sería un profesional a carta cabal. -Estaría dispuesto para los medios de comunicación cuando lo requieran. -Respetaría a mis vecinos, no haría parrandas en el vecindario. -Llegaría temprano a los entrenos. -Me quedaría después de los entrenos para practicar mucho más y hacer la diferencia. -Cuidaría mi vida privada, nada de escándalos. -Me capacitaría en la parte académica, hoy en día hay mucha posibilidad de hacerlo. -Y la pregunta es, ¿qué harían ustedes si fueran futbolistas?.
La reflexión de hoy nos lleva al África, en donde cada mañana los leones se levantan con la intención de cazar para alimentar a su manada, también la gacela se levanta cada mañana con la ambición de alimentarse de la mejor manera, el drama es cuando el león trata de comerse a la gacela, en ese momento el animal que esté mejor preparado saldrá vencedor, uno para escaparse: la gacela; y el otro para atraparla: el león. La pregunta de hoy es: ¿Estamos preparados para enfrentar las situaciones de la mejor manera, en un mundo tan moderno y cambiante en donde cada quien se levanta a buscar posibilidades?, ¿somos leones versátiles, flexibles a la hora de atrapar la oportunidad o somos leones perezosos y faltos de iniciativa, o por el contrario somos gacelas que se descuidan y caemos en la trampa de la desatención en el trabajo, el hogar o el estudio?. La elección es personal, porque herramientas sí tenemos, si no las aprovechamos… no le podemos echar la culpa al destino, mire en su interior, allí puede encontrar la respuesta.
