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| Jorge Cañaveral, atleta que se consagra a la formación de los niños y niñas del norte de Buga. |
La batalla de Maratón (en griego antiguo Μάχη τοῡ Μαραθῶνος, Mache tou Marathonos) fue un enfrentamiento armado que definió el desenlace de la Primera Guerra Médica. Ocurrió en el año 490 a. C. y tuvo lugar en los campos de la ciudad de Maratón a pocos kilómetros de Atenas. Enfrentó por un lado al rey persa Darío I, que deseaba invadir y conquistar Atenas por su participación en la revuelta jónica, y, por otro lado, a los atenienses y sus aliados. Una proeza recordada en esta batalla fue la de Filípides, que recorrió el camino desde Maratón hasta Atenas para anunciar su victoria. De allí se deriva el término maratón cuando de recorrer 42 kilómetros a pie se trata.
En Guadalajara de Buga más exactamente en el Polideportivo del norte, los atletas infantiles y juveniles se preparan bajo la orientación del profesor Jorge Arlex Cañaveral, el popular “Jorgi”, un deportista que ha destacado en Colombia y en Europa. Jorge ahora se dedica a forjar estos talentos en los aspectos técnicos y de comportamiento. Él sabe que esto de la enseñanza es toda una maratón pues debe “arrebatar” de las garras de la tecnología a estos muchachos y muchachas. Con mucha paciencia “Jorgi” trabaja incansablemente tras el propósito de alcanzar los objetivos.
Algo que llama mucho la atención es su forma de manejar las clases, pues imprime el juego como elemento básico de entrenamiento, haciendo de este deporte una diversión muy seria.
En sus propias palabras: “Aquí lo que interesa es el ser humano y su formación, el juego hace parte integral de las clase, los niños quieren practicar deportes; un ingrediente motivador es que hacemos diversas actividades, una de las que más llama la atención es la piscina, es un gancho que utilizo en mis clases para motivarlos”
El es Jorge Cañaveral, un deportista y entrenador que está convencido que su trabajo rinde frutos, que el ser humano necesita de estímulos, de buen trato, de exigencia, de ser tenido en cuenta y valorado. Cada día el grupo crece mucho más, es común ver en las clases niños y niñas desde edades tempranas saltando y corriendo, tratando de emular lo que el entrenador les indica.
Esperemos que esta “maratón” de la enseñanza tan motivadora continúe en el norte de la ciudad de Buga.
