“La risa es el sol que ahuyenta el invierno del rostro humano.” Víctor Hugo (1802-1885) Novelista francés. Derado
Un equipo de investigadores estadounidenses ha constatado en un estudio reciente que la risa produce cambios en dos hormonas relacionadas con el apetito: La Leptina y la Grelina, y que aumenta el hambre de la misma forma que lo hace el ejercicio físico moderado. La presente investigación se une a un amplio conjunto de estudios que demuestran el poder de la risa para mejorar la salud humana, tanto física como mental. (Yaiza Martínez.)
Investigadores de la Loma Linda University de Estados Unidos han descubierto que las carcajadas pueden provocar el mismo efecto en el organismo que el ejercicio repetitivo.
En un estudio de tres semanas de duración, dirigido por el investigador especialista en psiconeuroinmunología de dicha universidad, Lee S. Berk, fueron analizados los efectos de la risa en un total de 14 voluntarios sanos.
Según publica la revista Eurekalert, en concreto, se examinaron los efectos de la risa alegre y de la angustia en la modulación de hormonas del organismo humano que resultan esenciales para el control del apetito.
Durante el experimento, cada uno de los participantes tuvo que ver videos de 20 minutos de duración, en los que aparecían aleatoriamente imágenes de situaciones desasosegantes (angustia) o humorísticas. Cada vez que veían algún video, los voluntarios tenían que esperar una hora para ver el siguiente, de signo contrario, con el fin de que se les pasaran los efectos de la primera visualización.
Videos angustiosos y de humor
Los investigadores eligieron los primeros 20 minutos de la película “Salvar al soldado Ryan”, ambientada en la segunda guerra mundial, como video muy angustioso, y dieron a elegir a los participantes diversas opciones de videos de humor –de humoristas o de comedias- para asegurar que éstos se reían lo más posible.
Durante todo el estudio los científicos fueron midiendo la presión sanguínea de los participantes y también tomando muestras de sangre a éstos, después de cada película. A partir de dichas muestras, se establecieron los niveles en sangre de dos hormonas relacionadas con el apetito: La Leptina y la Grelina.
Cuando los científicos compararon los niveles de estas hormonas antes y después de la visualización de los videos, descubrieron que los voluntarios que vieron la película de Salvar al soldado Ryan no mostraban un cambio estadísticamente significativo en dichos niveles, y durante los 20 minutos posteriores.
Pero, por el contrario, los niveles de Leptina y Grelina en sangre de las personas que habían visto el video de humor, sí se habían visto modificados: El nivel de Leptina se había reducido y el de Grelina había aumentado, que es el mismo efecto que provoca el ejercicio físico moderado, a menudo se ha asociado con el incremento del apetito.
¿ENTONCES QUÉ ESPERAS PARA REIR Y GOZAR?
Un equipo de investigadores estadounidenses ha constatado en un estudio reciente que la risa produce cambios en dos hormonas relacionadas con el apetito: La Leptina y la Grelina, y que aumenta el hambre de la misma forma que lo hace el ejercicio físico moderado. La presente investigación se une a un amplio conjunto de estudios que demuestran el poder de la risa para mejorar la salud humana, tanto física como mental. (Yaiza Martínez.)
Investigadores de la Loma Linda University de Estados Unidos han descubierto que las carcajadas pueden provocar el mismo efecto en el organismo que el ejercicio repetitivo.
En un estudio de tres semanas de duración, dirigido por el investigador especialista en psiconeuroinmunología de dicha universidad, Lee S. Berk, fueron analizados los efectos de la risa en un total de 14 voluntarios sanos.
Según publica la revista Eurekalert, en concreto, se examinaron los efectos de la risa alegre y de la angustia en la modulación de hormonas del organismo humano que resultan esenciales para el control del apetito.
Durante el experimento, cada uno de los participantes tuvo que ver videos de 20 minutos de duración, en los que aparecían aleatoriamente imágenes de situaciones desasosegantes (angustia) o humorísticas. Cada vez que veían algún video, los voluntarios tenían que esperar una hora para ver el siguiente, de signo contrario, con el fin de que se les pasaran los efectos de la primera visualización.
Videos angustiosos y de humor
Los investigadores eligieron los primeros 20 minutos de la película “Salvar al soldado Ryan”, ambientada en la segunda guerra mundial, como video muy angustioso, y dieron a elegir a los participantes diversas opciones de videos de humor –de humoristas o de comedias- para asegurar que éstos se reían lo más posible.
Durante todo el estudio los científicos fueron midiendo la presión sanguínea de los participantes y también tomando muestras de sangre a éstos, después de cada película. A partir de dichas muestras, se establecieron los niveles en sangre de dos hormonas relacionadas con el apetito: La Leptina y la Grelina.
Cuando los científicos compararon los niveles de estas hormonas antes y después de la visualización de los videos, descubrieron que los voluntarios que vieron la película de Salvar al soldado Ryan no mostraban un cambio estadísticamente significativo en dichos niveles, y durante los 20 minutos posteriores.
Pero, por el contrario, los niveles de Leptina y Grelina en sangre de las personas que habían visto el video de humor, sí se habían visto modificados: El nivel de Leptina se había reducido y el de Grelina había aumentado, que es el mismo efecto que provoca el ejercicio físico moderado, a menudo se ha asociado con el incremento del apetito.
¿ENTONCES QUÉ ESPERAS PARA REIR Y GOZAR?